Páginas

jueves, 28 de enero de 2016

Trilogía Las crónicas de Kane

1. La pirámide roja


Nos quedan solo unas horas, asi que escucha con atención. Si estás oyendo esta historia, ya corres peligro. Mi hermana Sadie y yo podríamos ser tu única esperanza. Todo empezó en Londres, la noche en que nuestro padre hizo explotar el Museo Británico con un extraño conjuro. Fue entonces cuando nos enteramos de que, además de un reconocido arqueólogo, era una especie de mago del Antiguo Egipto. Rodeado de valiosas antigüedades, empezó a entonar extrañas palabras. Algo debió de salir mal porque la sala quedó reducida a escombros; Set, el dios del caos, apareció de la nada envuelto en llamas y a nuestro padre se lo tragó la tierra. No puedo decirte nada más; el resto deberás descubrirlo tú.


2. El trono de fuego 


Si alguien ha pensado que pertenecer a una familia de faraones es una ganga, que hablen conmigo o con mi hermana Sadie. Sin tiempo para reponernos de nuestra aventura en la Pirámide Roja, Amos y Bast acaban de encomendarnos otra de sus misiones exprés: despertar a Ra, el primer y más poderoso rey de los dioses. Dicho así, parece fácil, ¿verdad? Pero el problema es que nadie sabe dónde está, porque hace miles de años se retiró a los cielos y no se ha vuelto a saber de él. ¡Ah!, se me olvidaba, tenemos que darnos prisa porque Ra es el único que puede enfrentarse a Apofis -también conocida como «serpiente del caos»-, que está a punto de salir de la cárcel, y entonces será demasiado tarde.


3. La sombra de la serpiente


Genial, esto va de mal en peor. Apofis anda suelto sembrando el terror allí adonde va. Solo nos quedan dos días. Y, mientras, todos nos dan la espalda. Un grupo de magos rebeldes, encabezados por Sarah Jacobi, nos han acusado a Sadie y a mí de haber provocado el caos y de que Set esté en libertad. Juran que acabarán con nosotros... De los dioses, mejor ni hablar: nadie sabe dónde se han metido, y los que quedan, como Ra, el mismísimo dios del sol, solo piensan en comer galletas, babear y tararear cancioncillas sin sentido... Nunca hemos estado tan solos y tan desesperados; pero nos queda una última oportunidad: capturar la sombra de Apofis. Se me olvidaba decirles que nadie hasta ahora lo ha conseguido, así que, si sale mal, no estaremos aquí para contarlo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

No se envian libros ni tampoco se saben las fechas de publicación.